“La historia del barquito de papel”
Así comienza el cuento:
La historia del barquito de papel
que contagia aventuras
a otros barcos como él.
Un
día domingo, Lina y su hermano Miguel se levantaron temprano para ir a
jugar al parque pero -¡qué sorpresa, caramba!- ese día amaneció
lloviendo en toda la ciudad.
-¡Qué aburrido|- protestaron los chicos.
Y
se quedaron detrás de las ventanas, mirando llover. Por el borde de las
veredas corrían arroyitos qué la gente saltaba para no mojarse.
-¿Y si hacemos barco de papel?- propuso a Nina.
-Buena idea- contestó Miguel.
Y
dicho y hecho, con papeles y tijeras se sentaron en el suelo para hacer
barquitos hasta que se acabará la lluvia. ¡Chis, chas! ¡Tras,
tris!, hicieron cuatro barcos, cinco, una flota entera y por fin el sol
se decidió a salir.
-¡Llisto!- exclamaron los chicos. Ahora los haremos navegar en el borde de la vereda.
Pero cuando las embarcaciones estuvieron en el agua, ¡zas!, comenzó un nuevo chaparrón
-¡Rápido!¡Rápido!- dijo Miguel.
Y
recogieron los barcos para llevarlos a la casa otra vez. Sólo que con
el apuro Se olvidaron del barco más chiquito; el agua corría muy rápido y
pronto lo llevó hasta el final de la cuadra. En la esquina el barquito
se encontró con un grupo de hormigas que trataban de salvarse trepadas a
una hoja de lapacho.
-¡Socorro, Socorro!- clamaban las hormigas.
-Justo a tiempo -pensó el barquito-. ¿Quién mejor que yo para intervenir en el salvataje?
Y con mucha decisión se acercó a las hormigas, que estaban aterradas y haciendo gluglú.
-¡Adelante y arriba!- les ordenó el barquito, aproximándose hasta la hoja de lapacho que estaba por naufragar.
Una a una, muy rapido y con orden, subieron las hormigas al barco de papel.
-¡Icen las velas! ¡Leven en el ancla! ¡Timón a babor!-
Y el barquito se lanzó a la corriente dispuesto, por lo menos, a llegar hasta la otra esquina.
Las hormigas más chicas cantaban subidas a la vela:
“Se va, se va, la barca
Se va, se va, el vapor
mañana por la mañana
vendrá, vendrá mi amor”.
-¡Atención, niñas, que nos acercamos al hormiguero!- exclamó una hormiga mayor, cuando llegaron frente a la panadería.
El barquito aprovechó un remolino del agua y se detuvo con maestría al lado del cordón de la Vereda.
-¡Gracias, valiente velero!- exclamaron las hormigas a coro, antes de bajar con tanto orden y tan rápido como habían subido.
El
barquito se quedó otra vez solo, mirando al cielo donde comenzaba a
salir el arcoíris porque había dejado de llover. “¿Qué será de mí?”,
pensaba el barquito. “¿Me verán como un simple papelucho de la calle?”.
Y
seguía diciéndose estas cosas y otras por el estilo, cuando aparecieron
Lina y Miguel, que iban a buscar bizcochos a la panadería.
-¡Mira, Nina!- lo señaló Miguel.
-¡Pero sí es uno de nuestros barquitos de papel!- dijo Rosita, recogiéndolo con delicadeza.
-¡Un
valiente velero!- la corrigió el barquito en voz muy baja. Y aunque
nadie lo oyó, por lo menos estaba satisfecho de haber vivido una
aventura tan emocionante que tendrían que haberla filmado para la
televisión.
Y así termina la historia
del barquito de papel
qué ha quedado en la memoria
de otros barcos como él.
Probablemente el barco de papel sea una de las figuras de papiroflexia más
conocida. Seguro que alguna vez has hecho algún barquito de papel para
arrojarlo por un pequeño tramo de agua. Pues hoy te vamos a enseñar a
hacer uno desde 0. Los pasos son muy sencillos y conociéndolos podrás hacer la figura rápidamente.
·
MATERIALES:
MATERIALES:
HOJAS DE PAPEL CON FORMA RECTANGULAR
SI PODÉS, BUSCÁ DISTINTOS TIPOS DE PAPELES PARA PROBAR CUAL DURA MAS EN EL AGUA
REVISTAS, CUADERNOS, DIARIO, FOLLETOS…
PASO A PASO
· DOBLAMOS EL PAPEL POR LA MITAD.
· UNA VEZ DOBLADO, LO VOLVEMOS A DOBLAR UNA VEZ MÁS, EN ESTE CASO SIMPLEMENTE PARA
MARCARLO. ESTE ÚLTIMO PLIEGUE LO VOLVEMOS A ABRIR.
· LLEVAMOS AMBOS LADOS DE LA PARTE SUPERIOR HASTA EL CENTRO, LA LÍNEA MARCADA POR EL
ÚLTIMO PLIEGUE QUE HICIMOS.
· DOBLAMOS LA PARTE INFERIOR HACIA ARRIBA Y LAS ESQUINAS HACIA LA PARTE TRASERA, ABRAZANDO EL TRIÁNGULO.
· LAS OTRAS ESQUINAS INFERIORES LAS DOBLAMOS HACIA EL INTERIOR, JUNTÁNDOSE CON LAS OTRAS ESQUINAS.
· EL PLIEGUE INFERIOR LO DOBLAMOS HACIA ARRIBA, POR LO QUE NOS QUEDARÁ UN TRIÁNGULO.
· TIRAMOS DE LAS ESQUINAS HACIA AFUERA, DESDE DENTRO DEL TRIÁNGULO Y QUEDARÁ UN CUADRADO.
· DOBLAMOS LAS ESQUINAS HACIA ARRIBA, CON LO CUAL VOLVEREMOS A TENER UN TRIÁNGULO MÁS PEQUEÑO, DE LA MITAD DEL TAMAÑO DEL CUADRADO.
· VOLVEMOS A ABRIRLA Y TIRAMOS DE AMBOS LADOS HACIA AFUERA, CON LO QUE NOS QUEDARÁ EL BARCO. SI ABRIMOS LA BASE INTERIOR, EL BARCO SE PODRÁ SOSTENER SOLO.
PODÉS
HACER VARIOS BARQUITOS Y PONERLOS EN UN CHARQUITO, PALANGANA, BALDE,
FUENTE… O LO QUE TENGAS, Y PODÉS JUGAR CARRERAS SOPLANDO O MOVIENDO EL
AGUA… Y TAMBIÉN PODÉS JUGAR A VER CUAL DURA MÁS… O SUBIRLE MUÑEQUITOS
PARA QUE VIAJEN…
INVENTÁ TUS JUEGOS Y DIVERTITE MUUUUUCHO!!
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